viernes, 30 de enero de 2009

INVOCACIÓN AL ANGEL SOLAR



Ejercitando nuestro cuerpo de luz

Vamos a tratar de conectarnos aun más con nuestra Presencia Yo Soy, con ese
Ángel Solar que solo está esperando nuestro llamado.
Dicen que este ángel que está unido a nosotros tiene la mirada hacia
arriba, deseando ya retornar al Padre, pero que cuando nosotros decidimos
ponernos en comunicación definitiva con él, baja la mirada y nos sonríe.
Solo les pido que se relajen, se sientan tranquilos y entrecerrando los
ojos (para poder leer) sigan las instrucciones.

Tómense sus tiempos, traten de dejarse llevar, fluyan con las palabras.
No es importante si en una primera vez no experimentan todo lo que
quisieran, no tengan demasiadas expectativas (eso no ayuda en las
meditaciones), solo déjense llevar suavemente...
Esto es para ustedes...con todo mi amor...

Vamos a comenzar a respirar por la nariz. Siento como el aire entra , pasa
por la garganta y lo vamos a llevar hacia nuestro corazón...
Con la entrada y salida del aire nuestro corazón se enciende con una luz
blanca y radiante. Esa luz comienza a crecer...comienza a invadir todo
nuestro
cuerpo físico por dentro iluminándolo.(Tomémonos el tiempo necesario para
tener esta sensación).

Ahora que somos luz por dentro, la irradiamos hacia afuera formando un gran
aura de luz blanca con destellos dorados...
Ahora que todo es luz por dentro y por fuera vamos a centrar la atención en
nuestro corazón que está iluminado irradiando como un sol.

Desde allí nace un conducto de energía radiante que va hacia arriba, es el
cordón de plata.Lo observamos, sentimos que esa energía esta ahí.
Y...vamos a espiar por ese túnel de luz hacia arriba...

Tratemos de divisar o sentir, por encima de nuestras cabezas a unos tres
metros de altura otro sol resplandeciente, mucho más potente que la luz de
nuestro corazón.

Veamos y sintamos que la luz de nuestro corazón (Yo Real) está conectada con
el corazón de la Presencia Yo Soy, con mi querido Ángel de la Guarda.
Veamos ese conducto de energía blanca, con destellos dorados...
Es como si miríadas de estrellitas doradas circularan por ese canal...
Vamos a tratar de ver a nuestra Presencia
Sintámos la conexión, sintámos la luz fluyendo en nuestro interior...
Inhalo paz, amor y comprensión...
Inhalo salud, alegría y equilibrio...
Inhalo armonía y bienestar...
Ahora, vamos a pedirle a nuestra Presencia que baje un poco, para que yo la
pueda visualizar.

Cuando siento que está frente a mí, trato de relacionarme con ella. Podemos
agradecerle su servicio o preguntarle algo que quiera saber, podemos pedirle
que nos susurre al oído su nombre.

Escuchen a ver que responde o símplemente conéctense y sientan...
Ahora, vamos a pedirle a nuestra Presencia Yo Soy, a nuestro hermoso Ángel
Solar que nos abrace...

Nos damos todo el tiempo que queremos...
Sintámos su amor absoluto e incondicional, su energía que nos abarca, su
presencia, esta ahí frente nuestro y nos abraza...
Ahora le agradecemos por toda esa guía amorosa que nos da siempre y la
dejamos elevarse y volver a su lugar.

Cuando ya esté sobre nosotros, alrededor de tres metros por encima de
nuestras cabezas, la pedimos que nos envíe su manto protector.
Vamos a ver y sentir como desciende un tubo de luz blanca y radiante sobre
y alrededor nuestro (de más o menos dos metros de diámetro).
Este manto de luz nos va a proteger de toda energía discordante que venga
del exterior.

Pídanselo a la Presencia que se los envíe constantemente, con la práctica
este manto se transformara en un verdadero muro de contención de energía
radiante.

Con esa sensación... acordándonos que nuestro Ángel Solar siempre esta ahí
para guiarnos y protegernos...y que no estamos solos... muy lentamente y
siempre respetando nuestros tiempos internos,recordando esta experiencia,
cuando tenemos ganas , muy suave, vamos abriendo los ojos.

Para ustedes...
Con amor

clasificados gratis

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