UN HOMBRE DE EXITO

Un hombre de éxito sólo trabaja en lo que le gusta y hace lo que piensa que está bien, no hace todo lo que quiere, sino lo que ama y le produce satisfacción, a condición de no dañar a otros. El éxito auténtico se alcanza trabajando con honradez y respeto por los valores morales. Disfruta con las cosas más simples: tomar un helado, devorar una torta, servirte unos tacos, sentarte en una banca para mirar pasar a la gente, recrearte con el aroma de las madreselvas floridas y el zigzagueo luminoso de las luciérnagas. El hombre de éxito no pierde jamás la capacidad de soñar o de imaginar. Octavio Colmenares